El quince de marzo los tres grupos de tercero realizamos una visita didáctica, organizada por el departamento de sociales, a la ciudad de La Coruña.
La Coruña es una península al norte de la comunidad gallega. En la entrada de la ciudad se encuentra un jardín con flores amarillas formando la frase “Torre de Hércules”. La ciudad empezó a expandirse a partir de los años cincuenta porque la gente que vivía en las zonas rurales comenzó a trasladarse allí.
Una vez que llegamos, se subió la guía y nos dirigimos al Polígono de Elviña, en cuya entrada se encuentra el Barrio de las Flores. Los nombres de las calles se refieren al pasado de estas, ya que en cada calle había invernaderos de flores. La construcción de este barrio fue pensada para la comodidad y el bienestar de los residentes, de ahí que sus características sean la sencillez y la funcionalidad. Este barrio combina diferentes tipos de construcciones, como bloques de edificios, viviendas unifamiliares… Las casas y los edificios están separados para que haya más luz y corra el aire; no obstante, este barrio también presenta cosas negativas como, por ejemplo, que algunas calles son demasiado estrechas.
Más tarde, llegamos a las Viviendas de los Corrales que son, aproximadamente, unas cuatrocientas, a las que se les otorgó un premio arquitectónico. Las ventanas de estos edificios intentan aprovechar al máximo la luz solar. La población se encuentra agrupada, no amontonada.
Pasamos por un viaducto sobre el que hay un parque. Este viaducto soluciona muchos problemas de desplazamiento y permite que el tráfico sea fluido y comunica la ciudad con el puerto, el cual es el motor económico de la ciudad.
A continuación, circulamos por la Ronda de Outeiro, una calle concéntrica que sirve para comunicar barrios muy distintos y que pasa por encima de Alfonso Molina, la mayor entrada al centro de la ciudad.
Tras breves instantes, pasamos por el Barrio del Vioño, antigua cantera. Los edificios de este barrio tienen habilitados bajos comerciales. El barrio cuenta con plazas de garaje, un parque situado en el medio y un centro de salud cuya arquitectura es permeable, es decir, que deja pasar bastante luz natural.
Al poco tiempo entramos en el Polígono Industrial de A Grela, situado en el centro de la ciudad. Por desgracia este polígono no cuenta con buenas vías de acceso ni zonas donde aparcar, ya que fue diseñado y construido para la capacidad que tendría en aquel momento, y ahora las plazas de aparcamiento son escasas.
Minutos después de salir del polígono, pasamos por la "Cidade Escolar", un barrio llamado así porque en él se sitúan varias instituciones educativas. Ahí se encontraba el Campus Universitario, antes de ser trasladado a la Zapateira, a las afueras de la ciudad.
Después llegamos a Labañou, un grupo de viviendas sociales. Aquí se encuentra el MUNCYT (Museo Nacional de las Ciencias y las Tecnologías) que es el cuarto museo de la ciudad.
Pasamos junto el Aquarium Finisterrae, la Domus, cerca de donde se encuentra la Torre de Hércules, y por delante de la antigua cárcel provincial.
Antes de comenzar la ruta a pie por La Coruña, nos llevaron a la fundación Luis Seoane. Allí nos mostraron el edificio y nos explicaron lo que representaba y también nos dijeron el porqué de las distribuciones de los espacios de las salas que lo forman.
Después salimos de visita por la ciudad, donde lo primero que vimos fue el jardín conmemorativo a la memoria de Sir John Moore, un capitán de las tropas inglesas que ayudó a los coruñeses en la batalla contra los franceses. También vimos la Plaza de Santo Domingo, la Plaza de Santa Bárbara y la Plaza da Fariña.
Más tarde fuimos a la Plaza de María Pita, donde nos contaron que antiguamente se llamaba Plaza do Derrube. También nos explicaron que esa plaza era como un punto de encuentro entre personas y que separaba las casas donde vivía la gente noble, o que tenía poder, de la de los trabajadores y artesanos.
Después pasamos por la iglesia parroquial de Santiago, la casa Ombreiro, que antiguamente perteneciera a un marqués, las Galerías de la Marina y el mercado de San Agustín, construido en 1930.
Finalmente, a las dos de la tarde, hicimos una pausa para comer en un centro comercial que se encuentra al lado del puerto. Todavía nos quedaba la visita al Museo de Bellas Artes donde realizaríamos una práctica de la técnica del grabado. Allí concluía nuestra actividad después de haber visitado muchos de los sitios que hacen famosa la ciudad de La Coruña.